Green Korea presenta una de las campañas más interesantes que he visto en las últimas semanas. Me ha gustado porque en su simpleza radica su fuerza y hace de los espectadores más pasivos sus protagonistas.
El concepto es el de fijar un espacio en suelo por donde pasan miles de viandantes cada día con una imagen de un oso y un código QR. El espacio empieza a ensuciarse de forma predeterminada en la medida en que recibe las pisadas... para que al final termine de enjaular al oso...
Cuanto más pasivos somos, más encerramos a los osos!!
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